Soy la palabra que no espera
el ruido que hace hablar a tu silencio
el nudo de la cinta de tu pelo
la mirada que quiere subir a tu marea

El canto de esperanza en el asfalto
los dedos torpes que sueñan con tu espalda
las amarras de un barco encallado
el asesino sin culpa ni redada

Desde mi ventana

Desde mi ventana

lunes, 3 de marzo de 2014

Después de las fiestas





Y cuando todo el mundo se iba
y nos quedabamos los dos
entre vasos vacios y ceniceros sucios,
qué hermoso era saber que estabas
ahi como un remanso,
sola conmigo al borde de la noche
y que durabas, eras más que el tiempo,
eras lo que no se iba
porque una misma almohada
y una misma tibieza
iba a llamarnos otra vez
a despertar al nuevo día,
juntos, riendo, despeinados





Julio Cortázar

No hay comentarios: